miércoles, 8 de enero de 2014

El Testimonio (Parte 1)

Hoy publico el estudio que impartí este domingo pasado en la Escuela Dominical de jóvenes de la IBAO (http://ibao.es).

Hace unas semanas comenzamos a estudiar los principios de crecimiento cristianos y vimos que Jesucristo debía ser el centro y motor de nuestro crecimiento, y posteriormente hemos visto cómo  La Palabra y La Comunión se perfilan como dos de los cuatro principios fundamentales de crecimiento del cristiano. Ahora nos toca abordar el tercer principio de crecimiento, que es "el testimonio". Como en anteriores ocasiones, he dividido el estudio en 2 partes, de las cuales estudiamos la primera parte, dejando la segunda para la semana que viene.

Espero que este estudio sea de edificación para todos los que lo lean y que sirva a mis alumnos como guía para futuras consultas o referencias.

----------------------------------------------------------


Tema 17 – El Testimonio (Parte 1).

¿Qué es lo más importante que os ha pasado en vuestra vida? Para las personas hay muchas cosas importantes en su vida, pero para un cristiano lo más importante es: “Conocer a Cristo como su salvador”.

En base a esta afirmación, ¿Qué es lo más importante que, como cristianos, podemos hacer por otras personas? Mostrarles cómo conocer a Cristo como salvador de sus propias vidas.

Base bíblica:

En la gran comisión, Jesús nos mandó hacer tres actividades. ¿Sabéis cuales?. Ir y predicar a las naciones, bautizar a los convertidos y enseñarles lo que Jesús nos enseño a nosotros (Mateo 28:19-20 y Marcos 16:15). También en Hechos de los Apóstoles 1.8 se dice, “pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.”

A lo largo de la Biblia encontramos numerosos pasajes que nos muestran como el testificar deliberadamente es para Dios una parte de nuestras vidas como “llamados”.

Definiciones:

Testificar: Compartir el evangelio de Jesucristo en el poder del Espíritu Santo y dejando los resultados a Dios.

Evangelio: Todos los hombres son pecadores ante Dios. La paga del pecado es la muerte (eterna separación de Dios). Pero, fruto de su gran amor por nosotros, Dios envió a su Hijo, Jesucristo, para tomar sobre sí el pago de nuestro pecado cuando murió en la cruz. Después de tres días, resucitó de entre los muertos y ahora vive eternamente. Si una persona se arrepiente de su pecaminosa forma de vida, y tiene fe en que Jesús es el Hijo de Dios y es capaz de salvarle de la muerte eterna, se salvará.

“Evangelios en miniatura”:

Juan 3.16, Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

Lucas 24.46-48, y les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día; y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén. Y vosotros sois testigos de estas cosas.

Hechos de los Apóstoles 16.30-31, y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo? Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.

Romanos 6.23, Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

1 Corintios 15.3-4, Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras;


En primer lugar tengo que deciros: “Nadie dijo que los cristianos fueran gente de gran popularidad”, de hecho, Pablo dice en 2 Timoteo 3.12, “Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución”. Tenemos garantizado que la vida cristiana no siempre va a ser un camino de rosas, especialmente cuando compartimos a Cristo.

En segundo lugar, tengo una pregunta. ¿A quien vamos a complacer, a Dios o a nosotros mismos y a otros hombres? ¿Testificaremos o callaremos?. Gálatas 1.10, “Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.”.

El demonio trabaja horas extra para mantener a los cristianos callados. Para él, lo mejor después de un alma condenada es un cristiano callado. Si hablamos de Cristo descubriremos cuánta gente quiere tener una relación más íntima con Dios, sólo espera saber cómo hacerlo.

Vuestra relación con Jesús debe ser íntima, basada en el amor y en la obediencia. Si es así, el testimonio fluirá de forma natural desde vuestra vida controlada por el Espíritu. Ese es nuestro objetivo: rebosar y no trabajar. La efectividad de nuestras relaciones horizontales depende de la vitalidad de nuestras relaciones verticales. Cuando vemos a otros hermanos testificar con valentía, es un ejemplo para nosotros y un ánimo también.

8 Conceptos básicos acerca de testificar.

1. ¿Qué es testificar?

Testificar es decir lo que sabemos. Hechos de los Apóstoles 4.20, “porque no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído”. ¿Qué es lo que tu has visto y oído acerca de Cristo?. En tanto que digas estas cosas a otros, estarás testificando.

Como los testigos en un juicio, nosotros debemos decir “la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad”. No es nuestra responsabilidad convencer a nadie de nada. Todo lo que tenemos que hacer es decir lo que sabemos.

2. ¿Por qué debo testificar?

A) Porque es la única forma de que la gente conozca a Cristo. Juan 14.6, “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”. Juan 8.24, “Por eso os dije que moriréis en vuestros pecados; porque si no creéis que yo soy, en vuestros pecados moriréis”. Hechos de los Apóstoles 4.12, Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.

Este es un mensaje importante, pero ¿qué método eligió Dios para proclamar este mensaje?. ¿Lo escribió bien grande en el cielo?, ¿Mandó a los ángeles con altavoces por todo el mundo?. No. Miremos 1 Corintios 1.21, Pues ya que en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la predicación.

Romanos 10.13-14, porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo. ¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? Este es nuestro reto.

B) Porque queremos ver los beneficios de una vida con Cristo en otros. Si nosotros hemos conocido a Cristo y sabemos de los beneficios de una vida con Él, querremos compartir estos beneficios con la gente.

C) Porque compartiendo nuestra fe, crecemos y maduramos espiritualmente. Cuando compartimos nuestra fe, somos alimentados y fortalecidos espiritualmente.

D) Porque Dios nos lo ha mandado. Como cristianos debemos obedecer los mandatos de Jesús. Como Él dijo en Juan 14.15, “Si me amáis, guardad mis mandamientos”. Y Él nos mandó a los cristianos:

 Mateo 28.19-20, Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
Marcos 16.15, Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.

3. ¿A quién debo testificar?

A cualquiera que no conozca a Cristo y esté “a mano”. El Señor prepara “encuentros” con otras personas para usarnos como herramientas en su voluntad de que “todos los pecadores vengan al arrepentimiento”, empezando por aquellos que están más cerca de nosotros, como familiares, vecinos o amigos (recuerda Hechos de los Apóstoles 1.8). Este principio, además exige que estemos preparados (formados)para exponer de forma clara y concisa el evangelio a cualquier persona, en cualquier momento, dejando que el Espíritu Santo nos guíe.

Si estamos dispuestos y somos obedientes, Dios nos usará. No se trata de “apedrear” con el evangelio a todo lo que se mueva, ni hacernos aborrecibles al resto. Se trata, más bien, de pedir a Dios, cada día, que nos llene de su Espíritu y que nos haga sensibles a las oportunidades que Él nos haya preparado. Luego dejemos los resultados a Dios.

 Los 5 conceptos que faltan los veremos en la segunda parte de este estudio.





PREGUNTAS DE REFLEXIÓN PERSONAL 
1. ¿Por qué, para los cristianos, es importante testificar? Porque es la única forma de que la gente conozca a Cristo, porque queremos ver en otros los beneficios de una vida con Cristo,  porque nos ayuda a crecer y madurar espiritualmente y porque es un mandato de Dios.

2. ¿Cómo definirías testimonio? Es compartir el evangelio de Jesucristo en el poder del Espíritu Santo y dejando los resultados a Dios.

3. ¿Qué cosas te hacen ser reacio a testificar? Vergüenza, timidez, miedo al rechazo, ....
4. ¿Has tenido la oportunidad de compartir el evangelio con alguien? Yo sí, ¿Cómo ha reaccionado? Bastante mal, eludia la conversación y terminó metiéndose conmigo, ¿Cómo te ha hecho sentir su reacción? En principio mal porque pensé que no lo estaba haciendo bien, pero luego pensé que mi obligación era salir y contar el evangelio, y que el resultado es obra de Dios a través del Espíritu Santo.

5. ¿Cuáles son los conceptos o componentes básicos del evangelio? El hombre es pecador, por su pecado merece la muerte, Dios en su amor y misericordia mandó a Cristo al mundo para pagar por nuestros pecados muriendo en la Cruz y resucitando al tercer día. Gracias a ese sacrificio, todo el que crea en Cristo obtendrá la salvación.
6. ¿Piensas que tu serías bueno testificando a otros? No lo sé, creo que no. ¿Por qué? o ¿Por qué no? Porque veo que otros lo hacen mejor que yo.

7. ¿Cómo medirías la eficacia de tu testimonio? Por las veces que hablo del Señor a otros.

8.  ¿Se obtiene algún beneficio al testificar? Sí, muchos. Entre ellos obedecemos a Dios y crecemos y maduramos espiritualmente.

9. ¿A quién se debe testificar? A todos los que no tienen a Cristo como su salvador personal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario